De la paciencia
Los Jardines de los Justos. Imam Nawawi. Capítulo III
(Acerca de la sinceridad y la declaración de la intención en los hechos, dichos y estados, tanto externos como internos)[1]
Sagrado Corán
Dijo Allah, Altísimo sea:
"¡Oh creyentes, sed pacientes y perseverantes!"[2]
(La familia de Imran /200).
"Y seréis probados con el miedo, el hambre y el dinero; en vuestras vidas y en los frutos. Y el triunfo será para los pacientes."
(La vaca /155).
"Se recompensará a los pacientes de forma ilimitada."
(Los grupos /10).
"De los asuntos más grandes, quien tuvo paciencia y supo perdonar."
(La asamblea /43).
"Ayudaos en la paciencia y en la oración, pues, verdaderamente Él está con los pacientes."
(La vaca /153).
"Y os probaremos hasta que se demuestre quienes de vosotros son los muyahidin y quienes los pacientes."
(Muhammad /31).
Y son muchas las ayat del Corán que nos incitan a la paciencia y nos explican sus excelencias.
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Sahih Al-Kalim At-Taiyib
12.- Suplicaciones durante la oración (en rukú (inclinación), postración y asiento entre postraciones)
70.- Fue reportado por Huthaifa (رضي الله عنه) que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) fue escuchado decir, durante su rukú (inclinación en la oración): “Subhana Rabia al-Athim” (Glorificado sea Mi Señor, el Más Grande), tres veces. Y cuando él (صلى الله عليه وسلم) se postraba decía tres veces: “Subhana Rabia Al-Ala” (Glorificado sea Mi Señor, el Más Alto).
71.- Ali (رضي الله عنه) reportó una descripción del Apóstol de Alláh en la oración: “Mientras estaba en Rukú, él (صلى الله عليه وسلم) decía: “¡Oh Alláh! A Ti yo te reverencio. En Ti yo creo. A Ti me rindo. ¡Oh Alláh! Mi oído es debido a Ti, (tanto como es) mi vista, mi cerebro, mis huesos y mis nervios”. Después de levantarse del Rukú, él (صلى الله عليه وسلم) continuaba: “Alláh escucha a aquellos quienes lo alaban a Él. ¡Oh Nuestro Señor! A Ti es debida toda la alabanza, tanta como para que llene los cielos, la tierra, la distancia entre cualquier cosa más que Tú quieras y desees”. Al postrarse, él decía: “¡Oh Alláh! A Ti yo me postro. En Ti yo creo. A Ti yo me rindo. Mi cara se postra ante Ti, quien la creó; le dio forma y abrió su oído y su vista. Bendito sea Él, el mejor de los Creadores”.
72.- Aisha (رضي الله عنها) dijo: “El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) siempre decía durante el Rukú y la postración: “¡Glorificado seas Tú, Nuestro Señor! Toda la alabanza es debida a Ti. ¡Oh Alláh! Discúlpame y perdóname”, en un intento de usar el significado del verso coránico: “Elabora la alabanza de Tu Señor y busca el perdón. Verdaderamente él es el Perdonador” (71:10).
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Libro de la Sabiduría 3
I• La superioridad de la sabiduría
54. Abû Huraira relató que un beduino se acercó al Mensajero de Dios (B y P), mientras él enseñaba a sus discípulos, y le dijo: ‘¿Cuándo será la hora?’ El Mensajero de Dios (B y P) siguió hablando; entonces, algunos dijeron: ‘No le gus- tó lo que dijo (el beduino)’. Otros dijeron: ‘No lo oyó’; hasta que terminó de hablar. Entonces, dijo: «¿Quién preguntó por la Hora del Juicio?» El be- duino dijo: ‘Soy yo Mensajero de Dios’. Le dijo: «Cuando la confianza (en la autoridad y la hon- radez) se pierda, espera la llegada de la Hora». El beduino preguntó: ‘¿Y cómo se perderá la con- fianza?’ El Profeta (B y P) respondió: «Cuando la autoridad y el poder se entregue a gente incapaci- tada espera, pues, la Hora».
II • Quien levanta la voz difundiendo la sabiduria
55. ‘Abdullah Ibn ‘Amrû relató: ‘El Profeta (B y P) se retrasó un poco de nuestro grupo en un viaje que hacíamos. Cuando nos alcanzó, la oración nos apremiaba y realizamos la ablución (wudû). Solo nos frotábamos los pies (sin lavar- los correctamente); entonces, él clamó a toda voz: «¡Ay de los talones en el Fuego!». Lo hizo dos o tres veces’.
III • El imâm (lider) interroga a sus compañeros para probar su conocimiento
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Sahih Al Bujari
Libro de la Ablución 4
No se acepta la oración de quien no hace previamente la ablución (que inicia el estado del pureza, tuhur)
110. Abû Huraira dijo: ‘El Mensajero de Dios (B y P) dijo: «No se acepta la oración de quien co- metió un hadaz hasta que se haga la ablución (el wudû)»’. Un hombre de Hadramaut preguntó: ‘¿Qué es el hadaz, Abû Huraira?’ El respondió: ‘La emisión de ventosidades sonoras o silenciosas’.
II • La excelencia de la ablución
111. Abû Huraira relató: ‘Oí al Mensajero de Dios (B y P) decir: «El Día de la Resurrección mis seguidores serán llamados Al-Ghurr Al- Muhaÿÿalún (rostros y extremidades blancas) por las huellas de la ablución y quien pueda aumentar el área de su radianza debe hacerlo ».
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Sahih Al-Kalim At-Taiyib
8.- Oraciones al entrar al hogar de uno
47.-
El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Si uno pronuncia la remembranza de Alláh, el Altísimo al entrar al hogar de uno y al comer la comida de uno, Satán dirá (a sus agentes) que ustedes los han privado de ambos, de quedarse y de la cena (en la casa de esa persona) debido a la remembranza de Alláh, el Altísimo. Pero si la persona entra a su casa y no pronuncia la remembranza de Alláh, él (Satán) dirá (a sus agentes) que ustedes le han garantizado el permiso para quedarse (en la noche en su hogar). Y si la persona no pronuncia la remembranza de Alláh al comer, él (Satán) dirá (a sus agentes) que ustedes les han asegurado ambos, quedarse en la noche y tener la cena”.
48.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Cuando uno entra a su casa, debería decir: “¡Oh Alláh! Pido de ti la mejor entrada y la mejor salida. En el nombre de Alláh, el Altísimo, nosotros hemos entrado, en el nombre de Alláh, el Altísimo (deberíamos) salir Nosotros contaremos con Nuestro Señor”. Luego uno debe saludar a la familia de uno”.
49.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: ”¡Hijo! Si entras a tu morada después de saludar, ello será una bendición para ambos, para ti y para tu casa”.
La Enfermedad de los Deseos
Por Shaykhul-Islaam Ibn Taymiyyah
"Extraído “de Enfermedades de los Corazones y sus Curas” .
Traducido del Inglés por Ummu Abderahman Yasmina al Andalussia
La avaricia y los celos son enfermedades que conducen al alma a odiar aquello que la beneficiaría, y a amar eso que la dañaría. Esto es porqué los celos fueron mencionados junto al odio y el resentimiento en los ahaadith precedentes. En cuanto a la enfermedad del deseo y amor apasionado entonces ésta es el alma amando aquello que la dañaría y emparejado con esta es su odio a eso que la beneficiaría.
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